
Animales Fantásticos y dónde encontrarlos
Actualizado en noviembre 23, 2018
‘¡Es Wingardium Leviosa, no Le-vio-sá!’
¿Cómo olvidar a nuestro trío de magos favoritos? Harry Potter y sus aventuras fueron sin lugar a dudas una saga que marcaron a muchos de nosotros en su infancia. El estilo londinense de la historia entrelazado a un mundo mágico nos cautivó de por vida. Tanto que hace casi un par de años se estrenó otro film de la saga. Bueno… no precisamente de la saga pero sí relacionado al Wizaring World.
Animales Fantásticos y dónde encontrarlos nos narra la historia de Newt Scamander, el autor del libro del mismo nombre que Harry utiliza en su clase de Criaturas Mágicas. Ubicada muchos años antes del nacimiento del mago, Newt, recién llegado a Nueva York y con una maleta llena de animales increíblemente extraños, se ve inmiscuido en un problema cuando estos escapan y es ahora su misión reunirlos de vuelta antes de que el mundo mágico quede expuesto a los nomag …. o muggles, en Londres… o bueno, personas no-mágicas para dejarlo claro.
Es entonces que nos situamos en los fabulosos años 20, situación que da pie a un esplendoroso vestuario y contraste de clases sociales, juego que debemos decir, Collen Atwood, la diseñadora de vestuario, manejó bastante bien.
La historia se prestó para utilizar tanto trajes de la clase obrera, en tonalidades grises y depresivas como vestidos exquisitos dignos de un cabaret. Para la película se utilizaron más de 4 mil vestuarios…. ¡CUATRO MIL! Mil de ellos fueron confeccionados por la producción y el resto fueron prestaciones.
Es sin duda una buena película para disfrutar que cobra un significado más grande si has seguido las aventuras del mundo mágico de J.K Rowling desde tu niñez. A finales de este año se estrenará una segunda entrega de esta serie.
CURIOSIDADES
- Collen Atwood ha ganado Oscar por mejor vestuario con Chicago, Memorias de una Geisha, Alicia en el País de las Maravillas (2013) y, por supuesto, Animales Fantásticos.
- Ella no confecciona ninguno de los vestuarios que diseña, ni siquiera hace el bosquejo a detalle del mismo. Su proceso de trabajo funciona haciendo una idea base de cada vestuario, luego lo pasa a sus dibujantes y finalmente son estos los que introducen los detalles que previamente ella ha apuntado. “Si no lo hiciera así, nunca terminaría de pensar y diseñar cada prenda” comenta.