
El guardarropa de Frida Kahlo abierto 50 años después
Magdalena Carmen Frieda (sí, Frieda, luego cambió el sonido alemán de su nombre por el mexicano ‘Frida’) Kahlo, es sin duda en la actualidad uno de los íconos del país más reconocidos a nivel mundial.
La pintora mexicana nació en 1907 y ha sido reconocida por su, realmente, escandalosa y trágica vida, así como por sus autorretratos en los que imprimía su realidad. Comenzó con el arte tras sufrir un fuerte accidente de tráfico que la dejó postrada en una cama por meses, concediéndole un espejo a los pies de su cama y un caballete adaptado en el que podía pintar desde el hospital.
Su ideología arraigada al nacionalismo revolucionario, le concedieron su característica vestimenta mexicana: colorida y detallada. Fue un rasgo que compartió con Diego Rivera, su siempre amor y con quien también mantuvo una relación llena de problemas.
Pero lo interesante el día de hoy es que, al momento de su muerte en 1954, Diego ordenó que todo el guardarropa de la joven artista se escondiera en el baño de la casa donde ambos residían (Hoy museo de Frida Kahlo en la ciudad de México) y así la mantuvieran hasta quince años después de que él mismo falleciera ( hecho que no fue lejano, sino en 1957).
Sin embargo y aún con las ‘puertas abiertas’, el museo no abrió la habitación que contenía las piezas de Frida hasta cincuenta años después, en el 2004, cuando decidieron catalogar su contenido. Se invitó entonces al fotógrafo japonés Ishiuchi Miyako a realizar una sesión de las pertenencias de la pintora. Miyako decidió llevar a cabo las fotografías sólo con luz natural y una cámara Nikon de 35mm.
Fue en ese momento que, por primera vez, se tuvo acceso al guardarropa de esta mexicana. Éstas son algunas de ellas:

