
¿Comprar Moda Digital? (Y nunca tenerlo en tus manos)
Cuando hablamos de digitalizar la moda, el concepto se ha visto equivocado por la necesidad de llevar los eventos presenciales, como las pasarelas, al internet mediante videos o transmisiones en vivo. Pero para ser ‘correctos’, la moda digital se refiere a las prendas intangibles que sólo existen en el ciber-espacio…. ¿Qué?
En semanas pasadas estuvimos hablando sobre los NFT y cómo estos se han traducido a moda: Prendas principalmente artísticas que resultan imposibles de realizar en el plano real y que son utilizadas en fotografías de las Redes Sociales. Con esto en cuenta, ¿has pensado en comprar alta costura o moda digital? Tener en el espacio de la nube, intangible, una pieza exclusiva de grandes marcas o diseñadores de moda experimentales suena realmente interesante.
Tan sólo imagina tus nuevas fotografías con vestidos en llamas (un Juegos del Hambre hecho realidad), zapatos con alas, accesorios de oro puro y mucho más. The Fabricant nos dio la pauta con su vestido iridiscente.
Actualmente, existen diversas páginas al estilo marketplace que se encargan de recolectar a varios diseñadores de moda y vender sus creaciones digitales para que, al comprarlas, puedas hacer uso de ellas en la web.
Uno de los motores principales de la alta costura y la moda digital es la sustentabilidad. La mayoría de estos e-commerce recalca su participación en ser el cambio que la moda necesita, dejando de lado el consumo excesivo del Fast Fashion.
Aunque esto se puede debatir, lo cierto es que cada vez es más popular consumir este tipo de moda.
“No compres menos, compra moda digital”
Es el lema de DressX, una de las plataformas de moda digital más populares que existen en internet actualmente.
Ver esta publicación en Instagram
DressX se caracteriza por reunir a diferentes artistas como sus diseñadores. El esquema de funcionamiento es muy sencillo: Al momento de hacer tu compra, debes subir una fotografía tuya para que el producto pueda aplicarse a ti. La fotografía es sugerida con ciertos elementos (ángulos, iluminación, etc.) que ellos mismos te recomiendan para que el resultado sea lo más natural posible.
Aunque es cierto que hablamos de vestidos en llamas y zapatos con alas, también puedes encontrar modelos más aterrizados, prendas que cuando te regresen en fotografía o video, ni te darás cuenta que sólo existen en el plano digital.
Para poder participar en este nuevo movimiento (y trabajar y vivir de ello) es necesario tener conocimientos de modelado 3D en programas especializados. Si te interesa aquí puedes ver algunos cursos.
DressX se preocupa también por hacer seguir creciendo el negocio de estas nuevas marcas de moda, creando un enlace entre las colecciones y sus influencers para promocionar nuevo producto.
¿Qué dices? ¿Te animarías a sacar una colección completamente digital?
Ver esta publicación en Instagram